En 1986, Juan Pardo nos sorprendió con un auténtico latigazo de calidad en su producción musical. Aunque poco valorado, este álbum se encuentra entre lo mejor de su repertorio.
Pardo, siempre talentoso y versátil, añade un toque de sinceridad en esta ocasión, algo que a veces le había faltado en el pasado. Generosamente, reserva dos de las canciones más atractivas del disco para colaborar con sus amigos. Y aquí es donde encontramos el nexo inesperado: Mari Trini y Los Chunguitos. Ambos cantan junto a Juan en este álbum.
Los Chunguitos lo acompañan en una rumba pardiana que da título al disco. Una rumba ralentizada con letras características de su estilo.
La otra colaboración es con Mari Trini en el tema “Dos locos dos”, que también sería lanzado como sencillo. Una balada dulce con una buena guitarra que equilibra las locuras amorosas de ambos cantantes, cuyas voces se complementan de manera excepcional.
Pero el disco ofrece aún más. Por ejemplo, la canción “Otra vez” destaca por su garra y fuerza interpretativa, algo que rara vez habíamos escuchado de Juan. También está la nostálgica y sencilla “El hombre del norte”, que narra un encuentro casual cargado de humanidad.
Este álbum marca un cambio para Juan Pardo, ya que delega funciones que antes realizaba él mismo. José María Moll, antiguo baterista de Micky y Los Tonys, y luego acompañante de Juan y Junior, se encarga del sonido. Los músicos habituales de Juan, sin mayores ayudas, logran solventar el disco. Entre ellos, figuran personalidades como Iñaki Egaña, Jorge Moreno y Jose del Moral.
CARA A
CARA B
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