Valencia, mi tierra, celebra la llegada de la primavera con la Fiesta de las Fallas. Las calles de las ciudades se llenan de color, de música de banda y del estruendo de los cohetes. Estamos en plena semana fallera.
En este tiempo fallero, entenderéis que publique este disco del grupo de música popular valenciana Al Tall
Tercer LP de Al Tall, "Posa Vi, Posa Vi, Posa Vi", editado por Edigsa y presentado en el Palau de la Música de Barcelona. Con este trabajo discográfico, los temas no sólo recupera canciones de taberna, sino que aporta un gran número de instrumentos -mandolines, guitarras, guitarrones, dulzainas, tabalet, panderos, castañuelas, cañas, triángulo, bouzouki, bajo, laúd, laúd, flautas dulces, etc.- ..
Tachado de frívolo y acusado de incitar a los jóvenes a la alcoholemia en una insólita entrevista-agresiva publicada al entonces influyente revista Valencia Semanal, se ha convertido con el tiempo uno de sus discos más celebrados. El repertorio es espléndido; los arreglos, cuidadosos y efectivos; se cuenta con la colaboración de Toni Xuclà y Eliseu Parra; y, por si esto fuera poco, el talante vitalista y estimulante del malogrado Enrique Ortega alcanza aquí su máxima expresión. Escuchadle sin complejos: descubriréis hasta qué punto llegaba la burrera de la gauche divine nostrada en ese país en construcción.
Desgraciadamente, Enric Ortega murió el 14 de mayo de 1978, al poco de la presentación de este tercer disco: "Posa vi, posa vi, posa vi...", un recopilatorio monográfico de canciones populares de tasca en el que tuvo una especial vinculación, tanto en la selección de temas como en el arreglo de las versiones. El resto de miembros de Al Tall, junto con otras figuras destacadas de la Nova cançó valenciana (y también su viuda), lo homenajearon con un recital en los Viveros de Valencia. Al poco de la edición del "Posa vi, posa vi, posa vi...", Al Tall sacaron su único sencillo.
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