Mari Trini nos invita a un viaje íntimo y reflexivo en El Tiempo y Yo, un álbum que, como su título sugiere, orbita entre las reflexiones sobre el tiempo y el universo interior de la artista. Desde la primera canción, Te quiero con locura, el disco captura la pasión y la autenticidad que siempre caracterizaron a Mari Trini. No es de extrañar que este tema, lanzado como sencillo junto a Mi casa y mi guitarra, conquistara las listas y se mantuviera dos semanas en la cima de Los 40 Principales.
Pero este álbum no es solo una colección de éxitos, sino una declaración de principios y emociones. En La libertad, Mari Trini se convierte en la voz de un pueblo que empieza a saborear su reciente democracia. Su militancia por la libertad se siente en cada verso, como un susurro valiente que pide ser escuchado. Por otro lado, Acércate es una balada arrebatadora, cargada de sensualidad, mientras que Una tarde gris en Madrid nos sumerge en la melancolía con su ritmo de tango y un poema que habla de soledad con la elegancia de quien sabe convertir el dolor en arte.
En El verbo amar, Mari Trini desnuda su alma como artista: “...cuando no pueda mi cuerpo tus ansias ya consolar, estallará en mil pedazos como aquel viejo cristal…”. Es un recordatorio de su entrega y vulnerabilidad. Y si alguien osaba dudar de su lugar en la música, Compañeros de mi vida es su respuesta contundente: una reivindicación a una década de esfuerzo incansable para labrar su sitio en la historia. El cierre del álbum, una adaptación del tema de Leonard Cohen Quiero vivir sola, es un broche perfecto que encapsula su esencia: independiente, profunda y única.
El disco cuenta con los arreglos orquestales de tres grandes talentos: Waldo de los Ríos, Rafael Trabucchelli (regresando tras un tiempo de ausencia), y Danilo Vaona, quienes suman su magia a esta obra maestra.
Con El Tiempo y Yo, Mari Trini no solo regresó a lo más alto de las listas de ventas, sino que dejó un legado que sigue resonando. Este álbum es más que música; es una conversación entre ella, el tiempo y todos nosotros.
CARA A
CARA B
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